La mision es bien especial. Me estoy capacitando para la vida, la verdad todos deberian venir a la misión. Esta semana ibamos caminando y contactamos a una familia y les dijimos que teniamos un mensaje super especial que compartirles... Les fuimos insistentes y ellos iban para la tienda pero se regresaron a su casa para escuchar del mensaje. Compartimos con ellos y el espiritu estaba tan fuerte, totalmente derramado en la sala. Tienen una hija de 9 años, increiblemente pilas... Ella comprende todo muy pero muy bien. En Mixco hay muchas personas escogidas. El Señor realmente esta apresurando su obra en estos ultimos dias.
Estoy bien feliz, veo milagros cada día, encuentro familias cada día. Siento el espiritu, se que predico la unica verdad en el mundo. No importa lo que me digan o como me rechacen o las objeciones que me den. No puede haber nada que me haga dudar. He aprendido a amar al Señor y a su obra. Y hago lo que hago para ayudarle un poco, jamás podre pagarle por todo lo que me ha dado. He sido muy afortunada toda mi vida y eso se lo debo a Dios. Yo tengo que ayudar a todos a ser mas afortunados que yo.
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